viernes

El curso perfecto


Un curso de maquillaje no debería limitarse a dónde poner la sombra clara, dónde la oscura, dónde el colorete y "qué colores me quedan bien". Sus respuestas son un requisito necesario pero no suficiente.


Igualmente, investigando en escuelas de maquillaje, libros temáticos, prensa tampoco he llegado a encontrar el curso de maquillaje perfecto. Un buen amigo, maquillador inglés de esos que ganaron suficient e dinero con su profesión como para comprarse dos casas en Londres, me comentó una vez que él lo había aprendido todo de manera autodidacta, asistiendo a otros maquilladores, cogiendo un poco de aquí, otro de allí, analizando las fotografías de sus trabajos, viendo mucho cine y escuchando muy atentamente a sus clientas/es.


Yo hace un tiempo me preparé lo que sería el guión de mi curso perfecto de maquillaje; un monográfico que en su día me gustaría editar, y lo he estructurado en cuatro módulos.


Módulo de décadas y estilos:
- Maquillaje y cabello
- Estilo en el vestir
- Diseñadores
- Nacimiento de marcas
- Acontecimientos principales
- Films que recrean cada década
- Archivo fotográfico
- Pasarelas y editoriales de moda

Módulo de marcas de cosmética:
- Las marcas más conocidas y su historia
- Líneas y productos emblemáticos
- Recomendaciones personales tras haber trabajado en el sector.

Módulo técnico:

- Maquillaje por edades.
- Cuidado de la piel en general y por edades.
- Productos cosméticos: limpiadores, tónicos, lociones y cremas, contorno de ojos, etc...
- Principios activos más comunes.
- Pinceles de maquillaje.
- El color.
- La sesión: corrector, base, ojos, cejas, colorete, labios, cuello.
- Maquillaje de 5 minutos, 10 minutos, 20 minutos.
- Belleza por tonos de piel: latina, asiática, africana, oriente medio, pecas, porcelana.
- Color de cabello y maquillaje idóneo.
- Maquillaje por ocasiones: entrevista de trabajo, día, tarde, noche, fotos, boda.
- Trucos de belleza para un mal día.
- Trucos para disimular imperfecciones.
- Belleza y enfermedad.
- Estilo personal y estilo de maquillaje.
- Forma y proporción de la cara.

Módulo de belleza masculina


Algunas obras que yo recomendaría serían:

- Los libros de belleza de Bobbi Brown, que hasta la fecha no están editados en castellano.
- La Belleza del siglo, de la editorial Gustavo Gili, que tiene publicaciones muy buenas sobre moda.
- Un manual de estilo de alguna revista, en mi caso tengo InStyle, que tampoco lo he encontrado editado en castellano.
- Moda. El siglo de los diseñadores. Para mí uno de los mejores.
- …

martes

¿Labios rojos?


¿Existe algo más femenino que una buena pestaña? Sí, un labio rojo.


La “Carmen de España” portaba labios rojos, la “Rubia de América” también y de Dita Von Teese se puede llegar a pensar que los lleva tatuados,  siempre aparece impecable.



El labial rojo es algo que siempre ha pasado por la mente de toda mujer, incluso de todo hombre. Puedes hacer la prueba de pedirle a un hombre que se maquille los labios… irá directo al rojo. También puedes dejar la barra abierta en el lavabo y se la probará. No lo hará sólo por cuestiones de tendencias sexuales, lo hará simplemente por cuestiones sexuales. Sí, el rojo tiene ese poder, es un color atractivo por naturaleza.


Unos labios rojos no sólo transmiten sexualidad, también son reflejo de sensualidad, seguridad en nuestra personalidad, carácter, fuerza… pero, ¿cómo maquillar los labios de rojo? Lo primero es preparar bien el lienzo: Una piel seca y descamada no es buena base para ningún labial. Habrá que exfoliar e hidratar hasta conseguir una textura lisa y esponjosa.


La piel que rodea los labios también es importante. Debe estar bien depilada y con el tono uniformado, pues esto dará como resultado unos labios más destacados y mejor definidos. Un poco de iluminador, de lápiz dorado suave o rosa palo en la comisura dará una sensación óptica de volumen y contrastará más el rojo.


Para perfilar es necesario que la piel esté bien estirada, pues no estamos pintando sobre un folio, sino maquillando sobre piel. Debemos sonreír y estirar los labios. Las comisuras hay que maquillarlas hacia dentro, para evitar boqueras indeseadas. Rellenar un poco toda la superficie con perfilador nos ayudará a mantener el color por más tiempo. Un mínimo de base correctora o de maquillaje antes del labial también ayuda, pero sin pasarnos con la cantidad. Esto viene muy bien para los labios muy pigmentados que cambian el color de las barras.


Debemos empezar por la comisura, primero hacia un lado y después hacia el otro, así podremos corregir un poco si no estamos ante unos labios simétricos. La parte inferior del mismo modo, desde el centro hacia las comisuras.


Cuando apliquemos gloss debemos hacerlo en poca cantidad y sin acercarnos mucho al perfilador, pues de lo contrario nos quedará la misma boca que cuando comemos “pollo frito” … toda pringada de aceite.


Igual que sucede con el eye-liner, estilos hay muchos. Eso sí, si no te gustan los tuyos, mejor opta por un color neutro. Las periodistas de belleza aseguran una y otra vez que no es un color apto para tímidas. Yo encuentro que una chica tímida con unos labios bonitos puede estar muy sexy con este maquillaje, y si no que se lo pregunten a la asistenta personal de “El Diablo viste de Prada”.

¿Qué barra te recomiendo? Chanel e YLS tienen rojos muy bonitos, pero me quedo con la Ruby Woo de M.A.C., es mate, muy cubriente y de larga duración.

sábado

Eye-Liner, la asignatura pendiente

Siempre ofertado en los planes de estudio, es a la vez la asignatura más matriculada y  más suspendida. 


Existen muchos estilos de eyeliner: más grueso, más fino, doble, recto, curvado, increchendo, decrechendo … Puedes trazarlo de 2 maneras: ojo abierto, ojo cerrado.

Con el ojo cerrado es cuestión de comenzar en el lagrimal, o donde comienzan las pestañas (si tus ojos son más bien “juntos”), y seguir toda la línea de pestañas hasta el final, y después alargarlo al gusto. Verás que al abrir el ojo la línea queda curva.

Con el ojo abierto conseguirás que la línea quede recta. Se comienza al inverso, es decir, por el final. Marcas primero el rabillo. Hasta donde quieres que llegue. Dicha línea del rabillo debe ir alineada (imaginariamente) con la línea inferior de pestañas (debe parecer la prolongación de ésta). Después unes el rabillo con la línea superior de pestañas, y maquillas ésta hasta el lagrimal o justo antes. Verás que con el ojo cerrado dicha línea queda también recta, pero con dos inclinaciones diferentes.

Puedes comenzar con la línea fina, engrosas por el centro y después vuelves a afinar por el final. Otra opción es toda la línea con el mismo grosor, o bien de menos a más.


Si echas un vistazo a las fotografías de los backstages verás muchos estilos distintos. Algunos son aplicables a la vida real, otros son sólo para la pasarela, la revista de tendencias, el catálogo … No intentes hacerte todo lo que ves porque todo tiene su lugar.

A mí particularmente me gusta con una sombra clara, mate o satinada, y con la banana levemente marcada (sin pasarte). El eyeliner siempre reclama una longitud de pestañas kilométricas, una buena curvatura y suficiente volumen.

Un complemento ideal es un labio rojo. Yo lo maquillo con acabado mate y un poco rosado.